Practica Jumping Fitness y da un salto de calidad en tu vida

Seguro lo hacías de niña y te encantaba. Te pasabas horas dando botes en la cama elástica, intentando saltar más alto que tus amigas. Lo que antes era un simple juego infantil ahora es una tendencia deportiva. Se llama Jumping Fitness y puede quemar las mismas calorías que en media hora de running. Atrévete a subir al carro y dar este salto de calidad en tu vida.

Nacido en 2001, en República Checa, de las manos de dos jóvenes instructores de Spinning y Aerobic, Jana Svodova y Tomas Burianek, el Jumping Fitness es desarrollado sobre un trampolín hexagonal sin muelles. Algunos modelos incluyen una barra con un manillar para apoyar los brazos, lo que facilita los saltos y garante la estabilidad de los movimientos. El programa, también conocido como Power Jump o Jump Fit, combina saltos rápidos y lentos, con variaciones de intensidad, pasos aeróbicos, sprints dinámicos y elementos de power sports.

Exigente y sin impacto

Cada rutina de entrenamiento está acompañada de música innovadora, mucha diversión y sensaciones únicas. La exigencia de los ejercicios activa más de 400 músculos de forma simultánea, en especial abdomen, glúteos y piernas. El trabajo es intenso pero el minitrampolín absorbe gran parte del impacto, protegiendo, así, las articulaciones. Según algunos estudios, en una sesión de 60 minutos de Jumping Fitness se puede quemar hasta 800 calorías.

Aumenta la actividad linfática

Cuando empieces a practicar Jumping Fitness sentirás como mejora tu condición cardiorrespiratoria, el tono muscular, la coordinación y el equilibrio. Este tipo de ejercicio también incrementa la densidad ósea y ayuda a aumentar la actividad linfática, reduciendo el riesgo de padecer celulitis y varices. Sin olvidar que los saltos de alegría te harán liberar endorfinas y reducir el estrés diario. 

Apto para cualquier edad

Jumping Fitness es apto para todos los públicos. Su práctica está recomendada a partir de los 12 años para desarrollar las habilidades motoras. Sin embargo, como cualquier actividad física, se aconseja consultar al médico antes de realizarla. Te irás de la primera sesión con ganas de volver y repetir esta experiencia fitness. Y si asumes el compromiso y la constancia en clase, enseguida verás como cambia tu salud física y mental.