El resultado ha salido positivo. ¡Enhorabuena, estás embarazada! Sin embargo, eres de naturaleza deportiva y te preguntas si puedes continuar yendo al gimnasio y acudir a tu clase favorita. Hasta épocas recientes se pensaba que la actividad física era contraproducente pero la ciencia ha demostrado que el ejercicio durante esta etapa vital beneficia la salud de la mujer embarazada, así como la preparación y recuperación tras el parto. Eso sí, todo depende del tu estado de salud y del tipo de entrenamiento.
Practicar una actividad suave y de forma regular puede ser un momento muy agradable para ti y para tu bebé. Los beneficios son universales. Como primero paso se recomienda consultar con tu ginecólogo para saber qué pautas concretas debes seguir a la hora de combinar deporte y embarazo. Independiente de la actividad física indicada por el médico, su práctica debe ser adaptada a las condiciones de la futura mamá y siempre supervisada por un profesional.
Durante la gestación y a medida que el bebé va creciendo, la espalda de la mujer se ve obligada a soportar esos kilos extra. Con el Pilates podrás fortalecer la musculatura de la espalda y de los glúteos. “Los ejercicios que se plantean ayudan a mejorar la postura de la columna vertebral«, explica Ángel Merchán, entrenador en Homewellness Madrid, quién también recomienda practicar actividad aeróbica, siempre y cuando el ejercicio no conlleve riesgos o implique impactos.
Además de mejorar la postura, el deporte durante el embarazo también favorece la circulación sanguínea, ayuda a aliviar el dolor, fortalece el corazón del feto y prepara para el parto. «El deporte puede disminuir no sólo los dolores si no fortalecer y generar una mayor elasticidad de la zona del abdomen y la pelvis, y por lo tanto el cuerpo está mejor preparado ante el momento del parto», apunta la doctora Flor María Trujillo, experta en el cuidado por y para la mujer, y Fisioterapia Obstétrica.
Posparto
Una vez se ha dado a luz, se recomienda seguir entrenando a fin de lograr una buena recuperación de la forma física de la madre. Entretanto es preciso saber cuándo volver a practicar deporte y qué tipo de ejercicio es el más adecuado durante el periodo posparto. “Los ejercicios abdominales hipopresivos pueden resultar muy efectivos para aplanar el abdomen, cerrar una diástasis abdominal y tonificar la barriga”, aconsejan desde ¡Hola en Forma!. La gimnasia abdominal hipopresiva puede ser iniciada a partir de los tres meses de parto, es decir, una vez que el útero ha vuelto al tamaño anterior al alumbramiento.
Comparte este artículo con tus amigos.