Una de las actividades colectivas con más tirón en cualquier gimnasio, el ciclo indoor se ha convertido en la referencia de muchas instalaciones deportivas. Desde la música, pasando por la estructura de cada clase hasta llegar al ambiente que se genera, el gancho para atraer a los seguidores puede depender de muchas variables. No obstante, todas deben tener una cosa en común: un instructor que sea capaz de crear la magia y hacer adictivas sus sesiones.
Mucho más allá de pedalear encima de una bicicleta a ritmo de la música, el ciclo indoor destaca por sus beneficios a nivel físico y emocional. La lógica en el entrenamiento debe estar orientada a una práctica equilibrada, entretenida y, sobre todo, segura. Ante esta premisa, aparece una pregunta: ¿qué herramientas debe dominar el instructor para realizar esta actividad y así lograr que sus alumnos acaben la clase con ganas de volver? Hacemos un repaso de los principales mandamientos de un instructor de ciclo indoor:
Enseñanza del método y de la técnica
Una sesión de entrenamiento de ciclo indoor eficaz requiere de una cuidadosa planificación y de decisiones de entrenamiento responsables. Cada vez que elabores una clase, debes preguntarte ¿qué quiero que experimenten o aprendan mis ciclistas durante el recorrido? Enseña a tus alumnos como ajustar perfectamente la bicicleta, ayúdales a conseguir la técnica adecuada, préstales atención, asegúrate de que tus instrucciones sean claras y audibles, hágales saber que trabajan bien.
Conexión ciclística
Inicia la clase preguntando si hay alguien nuevo, con alguna lesión o inconveniencia médica. A continuación habla sobre seguridad, recordando a los alumnos las precauciones que deben tomar para garantizar un recorrido seguro y que deben sentirse libres para trabajaren a su propio ritmo. Establece el contacto visual, aprende el nombre de cada uno, recuérdales que ponerse en forma puede ser divertido pero requiere paciencia y perseverancia. Trata a todos con amabilidad, anímales en cada paso y refuerza siempre en positivo.
Elección de la música
La elección de la música puede ser la parte más gratificante y desafiante al crear una sesión de ciclo indoor. Se trata de un proceso altamente creativo e individual. Escucha la música que has elegido para tu sesión con los ojos cerrados y observa como diferentes tipos de música provocan diferentes estados de ánimo y sentimientos. «El buen instructor/a debe saber jugar con ella para lograr que el éxito este garantizado», aseguran en ciclotecnic.com.
Ropa apropiada
Las primeras impresiones cuentan y mucho. Por ello, ir vestido adecuadamente junto a otra serie de factores visuales a primera vista pueden hacer a los ciclistas a decantaren por un instructor/a u otro. «Nuestro cerebro sólo tarda una media de siete segundos en crear una impresión sobre alguien, incluso sin abrir la boca», recuerdan en foroindoor.com. El uso de la ropa y de accesorios hechos específicamente para ciclismo te dará un tono profesional y más credibilidad.
La buena educación
Mientras finaliza la clase, recuerda que esta es la última impresión que tus alumnos tendrán de ti. Agradece a todos por asistir, felicítalos por sus esfuerzos y sus logros. Pero «no te limites a sólo dar las gracias, hazles saber por qué». Diles que está deseando volver a verlos pronto.
Fuera de la bici
La enseñanza fuera de la bicicleta es una excelente herramienta para acercarte más a tus alumnos y evaluar como ellos están interpretando tus perfiles e individualizando sus experiencias. Este trabajo añadido te permite atender a sus dudas, preguntas e inquietudes. También te ofrece la oportunidad de motivar y animar con atención personalizada. Hazles volver a cruzar la puerta sintiéndose satisfechos y felices.